La llegada de un nuevo gato a casa
Llevar a casa un gato o gatito por primera vez es muy emocionante pero hace falta un poco de planificación.
Tanto si vas a llevar a casa a un gato adulto como a un gatito pequeño, sus necesidades serán muy parecidas, especialmente en la parte administrativa. He aquí algunas cosas que atender antes de su llegada:
Si aún no tienes veterinario, pide consejo a los dueños de gatos de la zona y registra a tu gato inmediatamente. Es más tranquilizador saber que ya está registrado, por si acaso enferma o necesita sus vacunas y controles.
Una vez resueltas las cuestiones administrativas, llegó la hora de divertirse: ¡a comprar! Necesitarás:
Una Jaula de trasporte seguro para gatos, dos cuencos: uno para la comida y otro para el agua. En lugar de los metálicos, elige cuencos de cristal o de cerámica fáciles de limpiar (a algunos gatos no les gustan los reflejos o sombras de sus cuencos de comida o bebida). Asegúrate de que son suficientemente grandes para que se inclinen y lameteen sin que sus bigotes toquen los lados, ya que esto puede desconcertar a algunos gatos.
Una caja de arena y arena. Es mejor usar el mismo tipo que usaba el criador o el centro de adopción, al menos hasta que se haya asentado; de este modo, lo reconocerá y, lo más importante, ¡sabrá para qué sirve!
Una cama de gato: muchos prefieren una cama estilo iglú para sentirse cómodos y seguros, o una cama elevada del suelo (por ejemplo, como parte de una zona de juegos).
Material de aseo, especialmente si tiene el pelo largo.
Un poste de rascado hecho de corteza de árbol o envuelto en sisal. El rascador ayuda a mantener las uñas de tus gatos en buenas condiciones. Con un poco de suerte, contar con un poste exclusivo para ellos distraerá su atención de tus muebles y alfombras.
Una variedad de juguetes. Sus juegos favoritos serán aquellos en los que tú participes, como los juguetes blandos sujetos a un cordón que tú moverás a tu antojo para que puedan perseguirlos y abalanzarse sobre ellos. Esto les proporciona un desahogo seguro de sus instintos naturales de caza.
Comida. Alimenta a tu nuevo gato o gatito con la misma dieta a la que estaban acostumbrados con su criador o centro de acogida durante al menos una semana, y cámbiale la dieta poco a poco solamente si así lo deseas o si hay motivos de salud para hacerlo.
¡Nuevo gato en casa!
Llegó el día tan esperado!
A pesar de tu entusiasmo, trata de mantener la calma en todo momento para que tu nuevo gato se instale sin asustarse. Hay algunos consejos que te ayudarán al estrenar la experiencia de tener un nuevo gato en casa:
Asegúrate de que puedes dedicar tiempo a tu gato mientras se adapta a su nuevo entorno, y ayúdale a acostumbrarse a una rutina establecida. Esto podría suponer la planificación del trabajo desde casa o reservar unos días de vacaciones para pasar tiempo de calidad con tu nueva mascota.
Prepararse para el viaje a casa. Los viajes en coche pueden ser un poco desorientadores y angustiosos para tu gato, así que trata su transportín con un espray de feromonas tranquilizantes, colócalo en un espacio seguro y plano o en el suelo, a nivel de los pies, y cúbrelo con una manta. Te darás cuenta de que el espray, la oscuridad y una conducción tranquila le ayudan a mantener la calma. Ve directamente a casa tras haberlo recogido —¡no es hora de ir de compras!—.
Cuando llegues a casa, coloca el transportín en el suelo de una habitación tranquila, ábrele la puerta y permítele salir a su manera y a su ritmo.
Los niños y otras mascotas saltarán de alegría por conocer al nuevo miembro de tu familia, pero su emoción podría asustar al recién llegado. Supervísalos al principio hasta que tu nuevo gato se acostumbre a su nueva casa.
Siempre es divertido elegir un nombre para una nueva mascota. Una vez que lo hayas decidido, usa su nombre cada vez que interactúes con él para que se lo aprenda rápido.
Todas estas emociones pueden ser agotadoras, sobre todo para un pequeño gatito, y enseguida querrá dormir la siesta. Coloca su cama en algún lugar cálido, tranquilo y lejos de corrientes de aire para que pueda descansar un poco.
Coloca su bandeja de arena en un lugar tranquilo de la habitación y de fácil acceso, donde no pueda ser molestado. Ésta debe estar alejada de su cama y de su zona de alimentación. Compruébala, al menos, dos veces al día, y retira sólidos y arena sucia inmediatamente. Vacía por completo y desinfecta la bandeja, al menos, una vez por semana.
Aliméntalo mediante varias pequeñas comidas al día, ya que te ayudará a desarrollar un vínculo muy estrecho.
Mantén a tu nuevo gato en el interior durante 2 o 3 semanas para darle tiempo a conocerte a ti y a todos los diferentes olores y sonidos de su entorno, así como para que pueda explorar cualquier rincón de su recién estrenado hogar.
Querrás que tu gato esté seguro, así que asegúrate de que no haya puertas o ventanas abiertas por las que se pueda colar. Únicamente deberíais salir a la calle cuando tú y él os sintáis confiados. Si no estás seguro de cuándo va a ser, habla con tu veterinario, que estará encantado de aconsejarte.
Recuerda que todo será nuevo, estimulante y excitante para tu nuevo miembro de la familia, lo que puede resultar un poco agobiante. Hazte a la idea de que puede que sea un poco reservado al principio, pero pronto debería adaptarse a su nuevo hogar y a la vida familiar. Si parece que no quiere salir de su caparazón, habla con tu veterinario.
Si le has dado un nuevo hogar a un gato de un centro de acogida, pregúntale al personal de la protectora de animales qué saben acerca de las preferencias que tiene tu nueva mascota. Puede que haya algo que puedas incluir u ofrecer a tu gato para que se sienta mejor en casa.
El criador de tu gatito y su veterinario estarán encantados de ofrecerte más ayuda y consejos sobre cómo cuidar a tu nuevo gato, velar por su salud y acomodarlo a su nueva casa. Lo único que tienes que hacer es disfrutar conociéndolo, jugar y divertirte con tu nuevo amigo peludo.